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Las mujeres viven más que los hombres en cualquier parte del mundo

Viernes, 12 de Abril de 2019
Envejecimiento y vejez

Un nuevo informe revela que las expectativas de vida siempre son mayores para las mujeres que para los hombres, independientemente del país donde vivan, y muestra que los habitantes de los países de mayores ingresos viven 18 años más que los de las naciones más pobres.

El promedio global de expectativas de vida ha crecido 5,5 años desde el inicio de este siglo, indicó un estudio de la Organización Mundial de la Salud publicado este jueves, que también subrayó que las mujeres viven invariablemente más que los hombres.

Según el informe Panorama Estadístico de la Salud Mundial 2019, entre el 2000 y el 2016, la esperanza media de vida aumentó de 66,5 a 72 años a nivel mundial y la expectativa de vida sana subió de 58,5 a 63,3 años.

“Sea por homicidio, por accidentes de tránsito, por suicidio o por enfermedades cardiovasculares, los hombres siempre están en desventaja frente a las mujeres”, señaló el doctor Richard Cibulskis, uno de los autores, durante la presentación del documento en Ginebra.

Los datos muestran que las mujeres viven al menos 1,4 años más que los hombres, aunque hay regiones en las que esa diferencia supera los 3 años.

Actitudes diferentes

Esa diferencia responde a varios factores, entre ellos una actitud distinta con respecto a los cuidados de salud, dice la publicación, citando como ejemplo que en los países con epidemia de VIH las mujeres están más dispuestas a hacerse la prueba del virus y a seguir las terapias antirretrovirales. Lo mismo ocurre con las y los enfermos de tuberculosis.

Hasta 2016, las probabilidades de que un hombre de 30 años muriera de una enfermedad no transmisible antes de cumplir los 70 eran un 44% más altas que las de una mujer de la misma edad.

Por otra parte, la tasa global de suicidios es un 75% mayor entre los hombres, que también duplican las muertes por accidentes automovilísticos en mayores de 15 años, y la mortalidad masculina derivada de homicidios es cuatro veces más alta.

El informe señala que la diferencia de las expectativas de vida entre sexos se reduce cuando las mujeres carecen de acceso a servicios de salud, sobre todo debido a los decesos por problemas relacionados con el embarazo y el parto, explicó la doctora Samira Asma, directora general adjunta para Datos y Análisis de la OMS.

Casi dos décadas de diferencia entre pobres y ricos

En cuanto a la brecha de la esperanza de vida en los países más pobres y más ricos, asciende a 18,1 años, mientras que las mujeres que mueren por complicaciones del embarazo o el parto pasan de 41 a 1 cada 3300 casos.

“Estos números subrayan la necesidad imperiosa de dar prioridad a los cuidados de salud primarios para gestionar con eficiencia las enfermedades no transmisibles y reducir los factores de riesgo”, apuntó la doctora Asma, quien lamentó que no se tomen medidas tan simples como el control de la presión arterial o la disminución del uso del tabaco, ambos entre los grandes causantes de muertes prematuras.

El estudio destaca que más del 90% de los países en desarrollo cuenta con menos de cuatro enfermeros y parteras por cada mil personas.

Asevera, además, que el nivel de ingresos afecta directa y definitivamente la esperanza de vida.

Esta es la primera vez que la OMS presenta los datos desagregados por sexos y países, aunque aclara que muchos gobiernos todavía no reportan su información con esos criterios, lo que dificulta la evaluación de necesidades específicas.

El informe confirma un alza de las enfermedades crónicas en los países de renta baja y media y advierte que esos padecimientos están a menudo muy relacionados con el hábito fumar, el consumo de alcohol y las dietas malsanas.

Esa tendencia es especialmente pronunciada en África, donde se exacerba con la falta de servicios de salud y medicinas.

El estudio fue lanzado en vísperas del Día Mundial de la Salud, el 7 de abril, que este año se centrará en los servicios primarios de sanidad como base de la cobertura de salud universal.

Fuente: Noticias ONU - 04/04/2019
https://news.un.org/es/story/2019/04/1453921