En el marco de la implementación del nuevo Sistema de Cuidados en nuestro país, la subsecretaria Ana Olivera recibió la visita de Paula Forttes, directora sociocultural de la Presidencia de Chile, con el fin de realizar un intercambio de experiencias entre el Sistema de Cuidados uruguayo y el programa piloto de cuidados "Chile Cuida", dirigido a personas adultas mayores.
“En Chile estamos avanzando en sentar las bases de un Sistema de Cuidados y miramos muy de cerca el proceso de Uruguay", explica Paula Forttes.
Chile cuida
Durante su visita a Uruguay Forttes intercambió experiencias con el MIDES y compartió la experiencia del programa piloto Chile Cuida que se desarrolla a través de una de las fundaciones de la presidencia.
El programa comenzó en 2015 en el municipio de Peñalolén y tiene que ver con los cuidados domiciliarios. Se sustenta en el diagnóstico del aumento de la necesidad de cuidados de la población adulta mayor de Chile y en la vulnerabilidad en la que se encuentran las mujeres que cuidan solas.
Además, este modelo de cuidado domiciliario brinda la posibilidad de generar empleo en el territorio. Chile Cuida se localiza en un territorio específico, se seleccionan mujeres que viven en ese territorio, son capacitadas en cuidados y son contratadas para prestar un servicio por horas en un domicilio, “para que la cuidadora familiar pueda tener tiempo disponible para el quehacer que estime conveniente”, expresó Forttes.
La directora chilena explicó que Chile Cuida funciona como marco para el programa de apoyo al “respiro de la cuidadora” que cuenta con psicólogos y grupos de autoayuda. En 2016 el programa se amplió a 5 municipios más.
En paralelo al proceso que se está desarrollando en Uruguay, el Ministerio de Desarrollo Social chileno está haciendo el mismo proceso para establecer los distintos niveles de cuidado infantil, en materia de discapacidad y está desarrollando otros pilotajes.
“La experiencia piloto del Chile Cuida permite ir afinando la división de tareas de los actores involucrados, los protocolos de atención, el seguimiento laboral del personal que se desempeña, la cantidad de horas de contratación, la selección de los cuidadores, etc”, asegura Forttes.
El programa Chile Cuida, junto con otras iniciativas, permitirán articular un Sistema Nacional de Cuidados de calidad con una cobertura nacional que se dará de forma progresiva para los personas mayores y para las mujeres cuidadoras.
“Uruguay tiene una ventaja que tiene que ver con la cantidad de población, que les permite hacer un pilotaje mucho más amplio y el desarrollo en materia de derechos y de enfoques. América Latina siempre los ha mirado como un referente muy importante”, afirma Forttes.
En común
Tanto el modelo uruguayo de cuidados como el chileno manejan dos conceptos claves. Centrarse en la perspectiva de derechos es un concepto fundamental que implica poner el énfasis en la persona y el respeto por su autonomía, así como poder elegir cómo ser cuidada, dónde, y que sus prácticas culturales o de vida sean contempladas.
El segundo, es que “toman en cuenta la dupla entre la persona que tiene la dependencia y la que cuida, ambas sujetas de derecho en una política de cuidados”, afirma Adriana Rovira, directora del Instituto Nacional de las Personas Mayores (Inmayores) del MIDES.
Disponible en:
http://inmayores.mides.gub.uy/innovaportal/v/60464/4/innova.front/yo-te-cuido