Por Cecilia Bernal[i]
La radio ha sido, desde sus comienzos, el medio que ha logrado establecer un vínculo especial con su público. Apelando siempre a las sensaciones, cautivando el oído del oyente, estimulando su imaginación y generando emociones. Existen muchas razones para entender el porqué del impacto de este medio en los Adultos Mayores.
En Argentina, desde la década del ´30, el radioteatro fue un género muy desarrollado, que ingresó en la vida cotidiana de la gente por la diversidad de sus contenidos y por la estética de su sonido. La memoria que ese aire generó en las personas fue muy potente y es por ello que aún se mantiene intacta.
El Taller de Radioteatro que se lleva a cabo en el marco del Programa de Extensión “La Comunicación y los Adultos Mayores” de la Facultad de Periodismo y Comunicación Social (Universidad Nacional de La Plata-Argentina), posibilita desarrollar actividades de intercambio entre los jóvenes estudiantes de la Facultad y los Adultos que concurren al mismo, fortaleciendo mecanismos que mantienen vinculados al resto de la sociedad.
Considerar la asistencia de Adultos Mayores a talleres de esta índole, es una forma de revertir cierta tendencia de la sociedad y del Adulto Mayor a la expulsión o autoexclusión. Considerando que la memoria necesita entrenamiento, el objetivo del taller apunta a rememorar momentos vividos por los Adultos Mayores, donde puedan encontrarse con el recuerdo de los tiempos de la radio, y en especial del Radioteatro.
El Radioteatro tiene la magia de la imaginación, el poder de la voz y los sonidos, y la fuerza de quienes lo realizan; presenta un desafío interesante para este tiempo, aprender a escuchar y a decir. El condimento especial de estos talleres con Adultos Mayores toma el valor de experiencia muy rica para los jóvenes estudiantes que dictan el taller, ya que tienen esta posibilidad de revivir un género casi ausente y realizarlo junto a los exponentes de la época dorada del radioteatro en Argentina.
El comienzo de los encuentros siempre resulta algo tímido: se hace teatralización de leyendas, juegos con las palabras y poco a poco se logra que los Mayores se animen al Radioteatro. Este género, que como dijo Alberto Migré (autor de los mayores éxitos del Radioteatro Argentino) “es olvidado por los adultos y desconocido por los jóvenes”, es reinventado a partir de las actividades de los profesores de 20 y los mayores de más de 60.
Pese a los cambios que ha sufrido la forma en que se presentó la radio, el vínculo se ha sostenido con la misma fuerza de sus comienzos. Los cambios no sólo fueron tecnológicos sino también sociales; los ritmos de vida se vieron modificados por la vertiginosidad de lo cotidiano, con una importante incidencia del avance de las comunicaciones.
La radio creció, primero tímidamente y luego de forma masiva, al mismo tiempo que los hoy Adultos Mayores también vivían sus transformaciones. Por esto, representó una gran compañía, por ser el único medio masivo que conectó al hombre con su entorno.
Aún hoy los Mayores viven ese romance con la radio, que en sus principios reunía a las familias alrededor del aparato, lo que posibilitaba una escucha colectiva. Tenía un carácter muy humano, porque haciendo uso de las emociones a través de radioteatros, acercaba a la gente un mundo mágico de historias y fantasías, como así también de situaciones cotidianas, en las que ellos se veían reflejados y conectados a personajes que hacían suyos.
Las obras producidas en el Taller de Radioteatro tienen en su mayoría el guión escrito por los Adultos Mayores y en algunos casos lo que generan son adaptaciones de obras literarias existentes. Ese proceso de creación y realización de los radioteatros los lleva a manifestar diversos sentimientos que les producen las historias –propias como así también las de sus compañeros-: alegría, emoción, recuerdos positivos, y hasta nostalgia por recuperar este género casi ausente en la radio de hoy.
Las producciones, escritas y representadas por los alumnos Mayores tienen un fuerte anclaje en sus realidades y se basan en historias de la vida real, incluso propias, por ejemplo una abuela cuenta cómo sus hijos les prohíben estar con la persona amada.
Esta actividad es sumamente productiva por el hecho de que ayuda a estimular el desarrollo de la imaginación y la creatividad. Se utiliza la radio como uno de los medios de comunicación con mayor credibilidad y anclaje, sobre todo para los propios Adultos Mayores, quienes tradicionalmente la escuchan y en este caso, además…. ¡se animan a hacer radio!
[i] Estudiante de la Licenciatura en Comunicación Social de la Facultad de Periodismo y Comunicación Social/UNLP - Docente en el marco del Programa de Extensión Universitaria “La Comunicación y los Adultos Mayores”