La mente madura

Viernes, 09 de Febrero de 2007

Canal: Envejecimiento y vejez

 

Comentario
Por Kenneth y Mary Gergen
Boletin del Envejecimiento Positivo
Número 27
http://www.healthandage.com
septiembre - octubre 2006

La premisa de que la biología del envejecimiento es intrínsecamente una biología de declinación se encuentra muy difundida y es, de hecho, la base para muchas investigaciones. Hallar un amplio informe sobre el envejecimiento que adopta la perspectiva contraria, es enormemente refrescante. Seguramente, una investigación muy abundante sugiere una declinación general aunque relativamente de menor importancia en el procesamiento de la información rápida. Sin embargo, como Gene Cohen
propone en su libro, The Mature Mind (La mente madura), este tipo de investigación no tiene en cuenta un proceso  muy importante del desarrollo positivo. Sobre todo, la biología del envejecimiento favorece el desarrollo de un talento que bien podríamos llamar sabiduría.

Cohen coloca partes de su argumentación en la investigación neuronal. Por ejemplo, cita la abundante investigación que demuestra que el cerebro permanece bastante flexible con la edad, y que siempre se están realizando nuevas conexiones neuronales. Además, cita investigaciones que indican que con el avance de la edad la gente puede contar cada vez más con ambos hemisferios del cerebro para realizar varias tareas cognoscitivas. Esto los separa de los jóvenes. Con este equilibrio creciente, argumenta Cohen, las personas que se hallan envejeciendo son más aptas que los jóvenes en sus capacidades por: 1. Pensamiento relativista (aceptar la incertidumbre, dejar a un lado los prejuicios), 2. Pensamiento dual (sostener un punto de vista y su posibilidad opuesta), y 3. Pensamiento sistemático (ver el cuadro en su totalidad, tanto el bosque como los árboles). Éstas son las principales características del pensamiento maduro.

Para incorporar profundidad y dimensión a su investigación, desde el año 2000 Cohen ha estudiado, en múltiples oportunidades, a más de 3.000 ancianos por medio de entrevistas y de cuestionarios. Para organizar y elaborar su opinión de la madurez en forma más completa propone cuatro etapas del desarrollo maduro. La primera es la reevaluación de la mitad de la vida, durante los 50s y los 60s, que es una época para la exploración y la transición (¿Adónde he estado? ¿Adónde deseo ir?) Una etapa así no
necesita generar una crisis; en su forma más positiva reditúa un sentido de búsqueda continua. Luego viene la fase de la liberación, entre los 60s y los 70s, (No soy una víctima de mi pasado. El tiempo para la acción es ahora. Si no es ahora, ¿cuándo?). Después de ocuparse sostenidamente de esto, puede haber una fase de recapitulación. En ella uno puede repasar su vida, resolver tensiones, e integrar viejas y nuevas actividades y relaciones. Esta puede ser una época para afirmar memorias, y para muchos, para volver a la familia, a la comunidad, al mundo. Finalmente, uno puede
experimentar una etapa de gritar: ¡ánimo, todavía vamos!, en los últimos años de los 80s y más allá, lo que puede implicar un deseo continuo de seguir avanzando, aún frente a la adversidad o la pérdida.
 
Para Cohen, el envejecimiento debe verse con una anticipación positiva. Es un período que puede llevar a un mayor compromiso, a relaciones más satisfactorias, a un nuevo crecimiento intelectual, y a más diversión. El retiro no significa sobrepasar la colina y descender de la misma, sino una época para subir a nuevas colinas. Empero, las transiciones positivas no están garantizadas biológicamente. Si uno no utiliza sus capacidades, ellas pueden perderse. Entre sus recomendaciones para el envejecimiento
positivo están:
- Formar vínculos activos con la comunidad que nos rodea;
- Balancear las actividades grupales con las individuales, una acción enérgica continuarla con una relajación;
- Incrementar los niveles de actividad por más tiempo; agregarse actividades más que restarlas;
- Realizar actividades de duración más prolongada y no las aventuras de corto plazo o de una sola vez;
- Cultivar amistades profundas;
- Considerar el aprendizaje de una actividad para toda la vida;

En suma, Cohen ofrece un informe inspirador y muy completo de la madurez.
Nosotros aplaudimos el esfuerzo.
 
Ken y Mary Gergen